No hay nada peor para un músico instrumentista que ver en primera persona

cómo se cae su instrumento, como lo empujan y lo ve caer desde una mesa, desde su estuche, desde el escenario. En definitiva, no importa desde dónde o con qué se produzca ese terrible golpe en nuestro instrumento.

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Además del problema estético, debes de tener en cuenta que no sólo afecta al aspecto; si  no que puede desarrollar problemas en la columna de aire, produciendo una perturbación importante y afectando al centro tonal del instrumento.

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En  otras ocasiones, el aire puede escaparse por poros del material que han quedado terriblemente fracturados, con el tiempo producirá, a todas luces, que la oxidación ataque esas zonas con mayor intensidad, pudiendo dar como resultado podredumbre y la destrucción total de la superficie del material.

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Nosotros podemos ayudarte, así que no te preocupes demasiado, tenemos los medios, las herramientas y los conocimientos adecuados, para poder dejar tu instrumento casi que mejor que antes!

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